La Nostalgia de Manolo
By DiablesseCorría el año de 2001, Carine Roitfeld dejaba Gucci (y a Tom Ford) para unirse al equipo de las grandes editoras de VOGUE, Francia para ella. Su halo de celebridad se guardaba únicamente para los verdaderos amantes de la moda. Pero Wintour, mucho antes del tan aclamado editorial de L’Icône realizado por Roitfeld en aras de Anna y al que muchos le dedicaron un extenso análisis mediático y perverso, “descubrió” a Carine en VOGUE USA (Agosto 2001) como una de las mujeres más chic del Age Issue, dedicándole un artículo realizado por Sarah Mower y fotografiado por Mario Testino.
Carine antes de la idolatría, de Jacqueline Follet (Devil Wears Prada) y de un futuro marcado por la leyenda que escribe de sí misma. Sin duda, eran momentos más simples…
April 7th, 2008 at 7:08 pm
yo quiero ser así de grande…..jejejeje
Ella tiene como más actitud rocker…por eso me cae bien…