Balenciaga: El futuro de un ayer
By DiablesseEse pequeño músculo que habita dentro del pecho de un amante de la moda, siempre ha latido por ti: Balenciaga o Ghesquière, los dos unidos… los dos separados. El ambiente moderno ha estado a la expectativa de tu ser y de tu creación, con todo su odio y con todo su amor, pero nunca con su indiferencia. Hoy presentas tu colección para Otoño-Invierno 2008 y, una vez más, rompes el silencio incómodo del desgano y la vida entera te dedica miles de palabras.
Permíteme entonces, brindarte las mías, siempre fieles a tu legado y dispuestas a entender tu presente, ése que muchos cuestionan, pero que en el fondo anhelan al saber que no les perteneces. Te vi aparecer la mañana de ayer, te vi caminar fundido en bellas esculturas, en mujeres cautivas de un nombre con dos mentes. Todas con la mirada misteriosa de la duda y con la falda corta acechante de la piel. Me hiciste vibrar, desearte, vestirte. Adoré tus pantalones estrechos y grises como las mentes que no consiguen comprenderte; me enamoré de tus sacos rígidos y drásticos como las letras que te han dedicado infinidad de detractores; suspiré por tus vestidos llenos de dualidad, de mujer y arquitectura, de suavidad implacable y de desafío comercial.
Eres el engaño artístico que enamora masas, pero son pocas las ocasiones en que he podido observarte sobre un cuerpo que recorre calles, que desfila por una alfombra roja o que mira un atardecer. No eres fácil de llevar, se requiere de valentía e inteligencia para soportar el peso de tus flores… de tus ideas. ¿Cuál es entonces tu pecado? ¿Esa bolsa colgada del antebrazo de más de una aspirante a ícono o esos zapatos que engrandecieron la inutilidad y el ego de un par de gemelas? Para mí, nada que merezca el juicio repentino de quien tiene el poder de la escritura y la cobardía de la propuesta.
Tu desfile ha sido maravilloso, digno de ti y digno de cada uno de los sonidos que se pronuncien a partir de ahora. Eres el representante perfecto de la excelencia en el corte, de la luz complaciente de los colores, de la satisfacción favorecedora de las formas. El futuro es incierto, aún para ti, pero has conseguido darnos un vistazo de lo que será y no será. Porque al menos yo, no esperaré a que me alcance el destino para portar un Balenciaga al estilo de Nicolas Ghesquière. El par de cómplices que sin conocerse superaron el paso del tiempo y de la historia.
Fotos: Fashion Verbatim
February 27th, 2008 at 2:21 pm
Felicitaciones por este espacio Fausto!, no lo había visto.
Luego vengo con tiempo para leer tranquilo.
Buenas fotos y lindo diseño!, muy claro para leer.
Felicitaciones!
Saludos a México!
Fer.-
February 27th, 2008 at 5:29 pm
No conocia el blog, pero mensaje recibido y por aqui nos veremos!
Gracias por el link!!
Besos
February 27th, 2008 at 9:14 pm
genial!
me encanto
March 3rd, 2008 at 2:23 pm
Palabras muy acertadas….
Me encantó….
Elsa